Ignea Visión
Hemisferio Sur. V. A.
Ignea Visión
Dejó de lado el tazón de leche verdadera , el calor de la madrugada llamó la atención, a la distancia una ígnea visión atendía sus sensaciones. El sudor empapaba las ropas, el aire, el columpio, donde degustaba su gruesa leche extraída con tanta ternura y dedicación de su vaca Lobelia. Sin apartar sus sensibilidades de la inverosímil exhibición se tiró a la hamaca contemplando cual niño destapara por primera vez el cielo, viendo las refulgentes estrellas.
Ignea Visión
Dejó de lado el tazón de leche verdadera , el calor de la madrugada llamó la atención, a la distancia una ígnea visión atendía sus sensaciones. El sudor empapaba las ropas, el aire, el columpio, donde degustaba su gruesa leche extraída con tanta ternura y dedicación de su vaca Lobelia. Sin apartar sus sensibilidades de la inverosímil exhibición se tiró a la hamaca contemplando cual niño destapara por primera vez el cielo, viendo las refulgentes estrellas.
Bruscamente Los alborotos Lo golpetearon , incorporándose, salió a ver qué sucedía en el corral de los animales”. Inquietos, de un lado para otro, chocaban entre sí!, el perro aullaba, las aves estaban desorientadas y exasperadas colisionando entre sí, como también con las paredes!, el caballo relinchaba pateando la puerta del establo, el cerdo revolcaba sus orejas en el charco, el toro intentaba ocultarse en el fardo de alfalfa! El caos era el emperador del establo.
El hombre abrió las puertas del corral. Cerró sus ojos, acercó la leche a sus labios dándole el beso insondable y eterno de amor puro como a una amada besara por primera y ...última vez... de pronto el calcinante viento...
arrasó con todos, con todo...con todos, con todo...con to...d...o...s.........
arrasó con todos, con todo...con todos, con todo...con to...d...o...s.........
Soy Lizbeth Aedo Castillo / Mony Delyz
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